¿Cómo se evitan los daños en las herramientas neumáticas debido a la humedad en el aire comprimido?

Muchas empresas -desde grandes organizaciones agrícolas hasta pequeños empresarios independientes- utilizan el aire comprimido para herramientas y neumática, entre otras cosas. El aire comprimido es necesario para accionar herramientas o inflar neumáticos. Pero ¿cómo se puede evitar que la humedad afecte al aire comprimido sobre todo ahora con las bajas temperaturas? En este artículo se lo explicamos en unos pocos pasos.

Paso 1

Un compresor comprime el aire comprimido y lo almacena en una caldera. Entre otras cosas, el compresor aspira los residuos y la humedad del aire exterior. No todo el mundo se da cuenta de las consecuencias de esto. El aire almacenado en la caldera se condensa. A menudo se olvida drenar el agua resultante. Un exceso de agua provoca, por ejemplo, la aparición de óxido. Para evitar esto u otros daños, utilice un purgador de condensados (automático). Con él se evacua la condensación de la parte inferior de la caldera. Consulte la gama de purgadores de condensados especiales (automáticos).

Paso 2

El agua, las partículas de agua o la condensación pueden separarse del aire detrás de la salida de la caldera. Para ello se instala un separador de agua ciclónico, en el que el aire pasa primero por el separador a gran velocidad por el lateral. Esto hace que las gotas caigan hacia abajo, donde se drena el agua. Vea la gama de separadores de agua ciclónicos.

Paso 3

Cuando el aire se enfría, se crea más agua. Para evitar la condensación innecesaria durante los días más fríos, instale un secador frigorífico de aire comprimido de freón. Este equipo enfría el aire hasta un punto de rocío de 4 grados. Esto significa que toda el agua hasta esa temperatura está fuera del aire comprimido. Aquí encontrará la gama de secadores frigoríficos de aire comprimido.

Paso 4 

Toda el agua extraída del aire comprimido contiene aceite. Esto se debe a que el compresor está lubricado con aceite. Esta agua contaminada no debe acabar en el alcantarillado: por eso se imponen sanciones por ello. Para evitarlo, instale un separador de agua y aceite. Este separa el agua -procedente del aire comprimido- del aceite mediante filtros, de modo que el agua puede verterse legalmente al alcantarillado. Vea la gama de separadores de agua y aceite.

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